Rascafría: una ruta encantadora

A una hora en coche desde Madrid queda Rascafría, pequeño y encantador municipio del Valle de Lozoya, a 1.200 metros de altura, con un temperatura muy agradable, incluso en verano. Desde allí hemos hecho una ruta de ensueño partiendo del Monasterio Santa María El Paular, bordeada por pequeños riachuelos que alimentan las Presillas de Rascafría, grandes pinos y un paisaje hermoso, aun ahora que todavía la primavera no luce sus mejores galas.

Mochila al hombro, hemos caminado unos 6 kilómetros de ida y vuelta, por un camino señalizado y de poca dificultad. Si os digo la verdad, quería quedarme allí y no regresar a la ciudad: Aire puro, sonidos sublimes, verdes por doquier. Una experiencia que vale la pena para todos los amantes de la naturaleza.

Cuevas del Águila

A dos horas en coche desde Madrid están las Cuevas el Águila, al sur de la Provincia de Ávila. 
Si os llama la atención conocer otro mundo, no duden en visitarlas.
Estar dentro de ellas es como recorrer otro planeta: colores fantásticos, luces y reflejos sorprendentes, formas inquietantes. Si os gusta la aventura subterránea, ésta es una magnífica opción.

Las grutas de singular estructura, están formadas por piedra caliza cristalina y su aspecto visual actual data de 12 millones años de antigüedad. Visitarlas es viajar en el tiempo al mundo subterráneo, sólo me faltó un traje de cavernícola para sentirme totalmente en armonía con el escenario. 

Senderismo por La Pedriza

A una hora en coche desde Madrid hemos llegado al Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, 33.960 hectáreas de macizo montañoso, dominado por afloramientos rocosos, pinares, pastizales alpinos y matorrales típicos de la alta montaña mediterránea.
En ese fantástico escenario natural se encuentra La Pedriza, un gran batólito granilítico de mas de 300 millones de años de antigüedad y que constituye un lugar de gran interés no solo geológico y paisajístico, sino también deportivo. 
Una experiencia maravillosa, de total conexión con la naturaleza.